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Macross es un remanente de tecnología antigua extraterrestre dejada en la tierra, la historia comienza cuando esta nave parte con una tripulación en medio de una invasión, donde sobresale de forma innovadora la ejecución de personajes y personalidades, en una trama muy bien estructurada rompiendo todos los esquemas de la tendencia real robot.

En un universo de aparente ridiculez inconsecuente, Haruko Haruhara llega a la tranquila ciudad de Mabase en busca de quién tenga el poder de emular a el rey de los piratas, quien es capaz de abrir portales espaciales y teletransportar incluso planetas enteros, formando grandes conflictos con la Medical Mecánica y la Fraternidad espacial, envolviendo a los protagonistas en un aparente sin sentido.

Es una de las series más divertidas, agradables y efervescentes del shoujo, de forma brillante crean un entorno maravilloso para proyectar la volátil personalidad de la protagonista incluyendo fugaces shows musicales para enriquecer el contexto audiovisual y narrativo de la historia, dando giros hacia el drama y romance, teniendo una excelente línea evolutiva narrativa.

Una mezcla de humor casi demencial con un arte visual súper deforme, en especial en los giros de humor, de forma brillante parodian y se burlan del mundo del entretenimiento musical y sus pretensiones y al mismo tiempo crean una cantidad de ocurrencias muy ingeniosas que logran sacar enormes carcajadas por cada capítulo, una de las más grandes obras de humor con un tinte muy original.

La primera impresión es su alta calidad de animación por computadora y los efectos audiovisuales haciendo un perfecto equilibrio entre el moe, fan Service, y una robusta propuesta audiovisual como era de esperarse de esta franquicia, utilizando fórmulas acordes para convertirlo en un anime muy entretenido, una versión algo inesperada para esta saga.

En su inicio intenta abusar de una gran cantidad de referencias hacia la cultura musical americana y británica, proyectando un efecto muy tibio, pero cuando logran ganar su propio estilo se centra en las historias de los personajes principales, en función de su evolución artística y musical ofreciendo una trama muy intensa, adornada con personajes y situaciones que la hacen interesante.

FLCL progressive logra mantener esa esencia, y atarla a nuevos personajes que se mantenían en la línea de lo interesante y audaz, incluso rayando con el cliché pero incluyendo otros que ayudaban a fortalecer y mantener la historia, también incluyen un poco el surrealismo onírico que hace parte de la esencia de esta franquicia.

En una propuesta innovadora utilizan la animación por computadora de alta calidad, con una historia estructurada, alejándose de lo propuesto por Macross 7, abriendo una nueva perspectiva para apreciar en calidad de precuela una serie de sucesos acontecido antes del inicio de la franquicia.

Presentando Cómo pico más interesante fue la relación emocional entre una visión de amistad entre amigas muy interesante que para el concepto de FLCL fue algo increíblemente desabrido, se pudo hacer esa serie así tal cual sin necesidad de utilizar el nombre de FLCL, Pero por otro lado el final apoteósico valió la pena.

Un Slice of life que parece algo común, implementando una historia con tintes emocionales y toques románticos interesantes, la animación le ayuda mucho y también la inclusión de elementos de música clásica, las particulares relaciones entre los personajes, y el emotivo final de paño de lágrimas que logra fortalecer un poco más el concepto que intentó plantar este anime